Intenté hacer el menor ruido posible, no me sirvió de nada. Oí la voz de mi padre .
.-Rosalia, ven aquí ,por favor.
Estaba en la cocina.
Retrocedí sobre mis pasos ,sabía que me la iba a "cargar".
Allí estaba él, sujetando entre sus dedos una taza de humeante café.
Dirigió su mirada hacia el reloj,era las 12 de la mañana de un domingo cualquiera..
.-¿Y bien? ¿Por qué vienes tan tarde?
Sus ojos no expresaban ni ira ni rabia contenida,sino tranquilidad y curiosidad..
Mi padre era un hombre que se había implicado más en mi educación que mi propia madre,que seguro que estaba aún dormida.
.-Bueno, papá...,me he "liao" sin saber por  qué y cuándo me he querido dar cuenta......
Yo mantenía la distancia con cierta maldad, le quería poner a prueba ,saber si confiaba en mí, si no se acercaría para comprobar mi aliento y descubrir si había bebido alcohol.
.-¿Has bebido?
.-No,papá, ¿Por qué este interrogatorio? Creo que ya soy mayorcita.
No se movió ni un centímetro del lugar donde se encontraba.
Me miró a los ojos.
.-¿Hasta cuándo crees tú que un padre debe de preocuparse por un hijo?
Me sorprendió la respuesta,me descolocó, la verdad es que no lo sabía.
.-.Bueno...hasta que sea mayor de edad,¿no?
.-!Ah! ....¿Quieres una taza de café?
.-Si papá ,gracias.
Estaba cada vez más sorprendida.
Vertió el café en la taza y me la ofreció.
.-.¿Entonces por qué vives todavía  con nosotros?
Tocada y hundida.¿qué podría decir?
"Es que los padres tienen la obligacion moral de mantener a sus hijos"
"Hasta que los padres quieran..."
Mi padre se encontraba con el derecho de decirme  "Y no es también una obligación moral enseñarlos a ser responsables y serios. Y si lo hacemos hasta que queramos, no teneís vosotros la obligación de un mínimo de respeto a nuestras costumbres."
Me había "entallado" Me había transmitido un certero mensaje,tenía que aceptarlo.
.-Perdona mi respuesta,papá.
El por respuesta,me abrazó fuertemente y me transmitió que también me comprendía.


Carmen.

Amarse entre mujeres.

Allí estaba yo ,a la espera,con mi vestido movido por el viento que se pegaba a mis muslos y a mis piernas,mi pelo rubio ,suelto,envidia de todas aquellas mujeres morenas,que  muy cerca de mi me miraban con expresiones de envidia,indignación, rabia, odio y  cariño.
Esperábamos que atracaran los barcos pesqueros que hacía día habían salido a la mar a pescar.
Vendrían los hombres sudorosos y sucios  pero con  expresión de alegría  para ver a sus mujeres que pacientemente esperaban su llegada.
Mirábamos sin pestañear el horizonte a la espera de ver el primer mastil. De pronto "La Manuela" una mujer brutota pero buena ,me dijo:
-Qué,María , estas guapísima, te habras puestos bragas limpias para la llegada de Lucia.
Yo solté una carcajada con la  miraba de aprobación de unas y  desaprobación de otras.
Sí, yo esperaba a una mujer,mi pareja, a Lucia. aparecería como siempre con aquel pelo ensortijado, con un mechón en la frente, un aro en la oreja izquierda, sonriendo con aquella boca carnosa donde yo bebía.
Mi madre me había dicho.:
.-Con tantos amigos y esos novios tan guapos y estudiosos  y has terminado enamorándote de una mujer y encima "pescaora".
Mi padre me sonreía y me guiñaba un ojo. El me comprendía.
Sí, era verdad, la habia elegido a ella  por esas noches que pasábamos ,envueltos nuestros cuerpos desnudos entre las sabanas haciendo el amor hasta la llegada del alba.
Por esos días que corríamos en la playa hasta caer extenuadas.
Por su risa.....por sus caricias.....por ....
.Aparecieron los barcos, yo enseguida la vi a ella ,venía con una sonrisa que llenaba su boca.Llevó sus dedos a sus labios y me lanzó un beso.
Todos nos miraban.
A nosotros,ya no nos importaba.
Alguno de aquellos hombres venían cansados, medio muertos.
Mi  Lucia venia  con aquellos brazos fuertes pero suaves abiertos y me abrazó fuertemente mientras besaba mi boca.Su cuerpo chispa despedía. Yo sabía que alguno de aquellos hombres no cumpliria pero no así mi Lucia,sus ojos despedían el fuego que dentro de ella ardía. Otra noche mas que nuestros cuerpos se reconocerían ,se fundirían y nuestros efluvios,aquellas sabanas limpias, mancharían.

Carmen..

¿Dónde te encuentras?

Te busco.:
              Cómo el caminante en el desierto busca ese oasis de hierbas verdes y aguas que brotan de las rocas ,para calmar su sed.

               Cómo los ojos de ese niño ,que al sentirse indefenso buscan las manos de su madre amada.

                Cómo los brazos de esa mujer quieren abrazar por última vez  a ese hombre,al sentirse abandonada.

                 Al alba ,cuando los rayos del sol iluminan la Tierra yerta y apagada.

                 ¿Dónde te encuentras amor mio?
                 
                     Yo solo te quiero a tí, no las que el destino va ofreciéndome en esta trágica danza.

                      Voy perdiendo la esperanza,siento como una tela de araña va tejiéndose dentro de mi,atrapando mis sentimientos,pronto llegará a mi alma.

                       Te buscaré en otra dimensión,en otros mundos.

                        No te vayas, no abandones tú, se que al final te encontraré y entonces sera como esa tempestad que arrasará ,los cielos ,la  Tierra y las almas.

Carmen.
             

¿Soy diferente?

Puse el espejo encima de la mesa,delante mía.
Empece a comerme aquella suculenta paella. Estábamos reunidos,mis padres,mis dos hermanas ,mayores que yo, algunos familiares y amigos.
Todos me miraban con expresión de extrañeza.
Entraba el tenedor en mi boca de forma pausada, lleno de aquellos granitos de arroz de color amarillo,con trocitos de calamares,pulpo..etc.
Me observaba en el espejo,como movía mis carrillos,como masticaba.
Deje un momento de comer y los miré a todos de forma desafiante,acobardados  miraron sus  platos  , entrando sus tenedores en ellos.
Yo los observaba, comían de la misma forma que yo lo hacía,con la singularidad,de que algunos de ellos ,hacían el mismo ruido que las maracas al ser movidas.
Seguí comiendo hasta terminar la comida que había en mi plato.
Puse el espejo en el suelo y dirigí mi mirada hacia  todos ellos.
Nadie se atrevía a decir nada.Me conocían, sabían lo borde que era y la fluidez de palabra que tenía.
Una de mis hermanas era más borde que yo.
.-.¿Y bien? ¿Por qué?
Burlona y desafiante la contesté
.-Simplemente quería saber si comía igual o diferente a vosotros por ser lesbiana.

Carmen.

Cuándo se ama de verdad

Podía sentir la tensión,no me atrevía a levantar mis ojos de la mesa .Sentía su mirada sobre mí como las losas  de una tumba. Me imaginé aquellos ojos azules tornándose metálicos y el rictus de su boca entre amargo y burlesco.
El silencio se hacía denso,se podía escuchar el aleteo de una mosca.
.-Y bien ¿cómo ha sido? ¿dónde? ¿con quién?
Su volumen de voz había ido subiendo y el tono cada vez más crispado.
Yo seguía en silencio.El dolor atenazaba mi garganta.
.-!Me escuchas ,joder!
Al mismo tiempo que hablaba dio dos puñetazos en la mesa, lo que hizo que los platos y vasos por unos instantes se mantuvieran en el aire.
Me desmorone,apoye mi cabeza en la mesa y la rodee con mis brazos.
.-No, si encima  vas a ser tu la víctima. ¿cómo has podido contagiarte? ¿con quién te has acostado?.
Se levantó y vino hacía mí,abrió mis brazos y me hizo mirarla a la cara.
.-Tienes la desvergüenza de no mirarme a los ojos.¿sabes el riesgo que me has hecho correr?Bueno-sonrió despectivamente- puede ser que yo también, este ya contagiada.
Sentí una latigazo en mi cuerpo.
Pensé. !No Dios mio,no!llévame a mí, pero que ella no tenga nada.
Intenté abrazarla, no se dejaba.Cayó de rodillas al suelo.
.-.¿por qué me has hecho esto? Yo que he bebido hasta la última gota de sudor de tu cuerpo.Que nos hemos amado noches enteras , qué nuestros apetitos sexuales fueron saciados hasta la promiscuidad.
Me arrodille junto a ella.
No tenía fuerzas pero saqué valor ,tenía que decírselo.La miré a los ojos..
.-Fue una noche que discutimos y me fui. Me la encontré en la calle.Era una mujer poco atractiva,me convenció,bueno, yo también fuí culpable.No se por qué.,!maldita sea mi vida! .Sería en venganza por nuestra discusión ? ¿por mí debilidad? Pero ocurrió.
Me iré, amor mio, me marcharé, te dejare.....
Ella entonces cogió mi rostro entre sus manos.
.-Mi amor, no te iras de mi lado,lo que tenga que pasar lo pasaremos juntas, lo que tenga que ocurrir nos ocurrirá a las dos  y si morimos nuestros espíritus volaran a otra dimensión.

Eran dos mujeres y una de ellas tenía  SIDA.

Carmen.

Homenaje a los que se matan por amor.

Apoyadas en aquellas vallas que rodeaban aquel mirador ,dónde se podía apreciar la bravura del mar,nos mirábamos a los ojos.Ella llevó el cigarrillo a sus labios y aspiró ,soltó una bocanada de humo dirigida hacía mí.
Dibujo una sonrisa en sus labios ,aquellos labios que tantas veces besaron los mios.

Me preguntó

-¿Cuánto me quieres? ¿Morirías por mí?
Yo la miraba sin ni siquiera pestañear ,no quería mover ni un músculo de mi rostro, no quería descubrir lo que mi alma sentía.
Una lucha intensa se producía en mi interior..
No quería demostrar cuánto la amaba ,cuánto la deseaba.
Ante mi silencio ,echó su cabeza hacía atrás ,su pelo negro quedó a merced del viento.
Sus ojos reflejaban el triunfo.
Soltó una carcajada.

-Venga ya, no disimules ,sé cuánto me amas.
Tenía razón, me poseía,,era prisionera en mis sentimientos hacia ella. Mi libertad  se había perdido entre sus brazos ,entre nuestros propios sexos.
No podía dejar de mirarla ,sentía como sus ojos se adentraban en  mí y veían mi sufrimiento.
Intentaba controlar el temblor de mis manos.
Ella cruel me miraba cómo el cazador que triunfante, mire la pieza conseguida.
Cogí su cara entre mis manos temblorosas.
-Rié ahora,pronto tus lágrimas llenarán esos surcos que van a los rios que desembocan en el mar.
Tu grito de dolor surcará el cielo.
Porque yo me habré ido,ya no estaré aquí.Seré libre por fín,mi espíritu recorrerá otros mundos y tú aquí sola ,de rodillas, morirá de pena por haberme perdido.
Me subiré a lo alto de estas vallas,dejaré caer mi cuerpo que  volará hasta esas rocas ,que abrirán sus brazos para acogerme en ellas. Demostraré que por amor ,también, se muere.


En el silencio de aquella mañana  un grito desgarrador cruzó la tierra,el mar y el  cielo.

Carmen.

 ¿Nuestros tiempos.

Nuestros tiempos ¿Qué fue de ellos? Qué hicimos con ellos?
Nos paramos a pensar en un momento de nuestras vidas  cómo los utilizamos ?,¿los pasamos o los vivimos?

Los utilizamos en beneficio nuestro o en beneficio de los que amamos?
Los vivimos con la intensidad de disfrutar cada minuto de nuestra vida  o dejamos escapar esos minutos  sin llenarlos?
¿Perdimos algunos segundos en reflexionarlos?


Mis tiempos.
¿Qué hice con mis tiempos?
Esos tiempos marcaron mi vida
o yo los marqué a ellos?

¿Los perdí o los viví?

Cuántos minutos tardaban mis lágrimas
en resbalar por mis mejillas?
Cuántos segundos agotaron mis labios
en sonrisas?

Aquellos tiempos que pasé esperándote
en el silencio de mis noches  y
a la luz de las estrellas.

¡Malditos tiempos¡

Que tú perdías sin estar conmigo
por los que yo luchaba por estar contigo.

Ahora ya no importa
si los perdí  o los viví

Porque ellos no apagaran en mi cuerpo
el calor que dejo el tuyo
No quitaran de mi boca el sabor de la tuya.
No arrancaran de las yemas de mis dedos
las partículas de tu piel.

No les dejaré adentrarse en mis sueños
para borrar tu imagen de ellos.
Y tampoco podrán evitar que mi alma
quede suspendida en los tiempos que te ame y  te desee

Carmen.